Lo haremos en tres pasos, primero la masa, luego el relleno y por último la cobertura.
Para la masa:
250 Ml. de leche
4 Huevos
1/2 Cucharadita de azúcar
160 Gr. de harina
100 Gr. de mantequilla
1 Cucharadita de sal
Para la crema pastelera:
250 Ml. de leche
60 Gr. de azúcar
40 Gr. de harina fina de maiz
2 Yemas de huevo
Para la cobertura:
Chocolate negro ó con leche, de cobertura.
Empezaremos preparando la masa, podemos hacerlo en el robot de cocina o manualmente.
Calentamos en primer lugar, la leche, la mantequilla, la sal y el azúcar, hasta que veamos que esta todo bien integrado.
Bajamos la temperatura y añadimos la harina sin dejar de remover, si vemos que nos cuesta el integrar todo, podemos usar unas varillas eléctricas.
Una vez que tenemos la masa, dejamos reposar 10 minutos y a continuación incorporamos las yemas de huevo y continuamos mezclando.
Guardamos la masa en la manga pastelera y una vez que se haya enfriado del todo, hacemos tiras sobre un papel de horno vegetal o antiadherente.
Metemos los pastelitos al horno precalentado a 200º y esperamos 20 minutos o hasta que esten dorados, hacemos un pequeño corte en uno de los extremos de cada pastel y volvemos a introducir unos cinco minutos más.
Sacamos del horno y dejamos que se enfríen totalmente.
Para la crema pastelera necesitaremos una batidora con varillas o bien el robot de cocina.
Necesitaremos calentar todos los ingredientes a la vez a una temperatura media/alta mientras batimos y hasta conseguir una crema consistente.
Una vez conseguido y enfriada dicha crema, la podemos introducir en un biberón de cocina con boquilla para rellenar o bien en una jeringuilla.
Derretimos el chocolate de cobertura siempre al baño maría y una vez fundido, con ayuda de una cuchara, cubrimos los pasteles y los introducimos en el frigorífico hasta que el chocolate endurezca.
Parece elaborada, pero os puedo asegurar que merece la pena!!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario